Aracne: Textil, Cuerpo y Territorio

Colectiva La Curva
7 al 15 de abril de 2025 – CRIA Chiloé / Centro Cultural Capanegra

Entre hilos, cuerdas y fibras que tejieron tanto materia como relaciones, la Colectiva La Curva, compuesta por Isabel Rodríguez, Andrea Retamales, Maira Quintana y Aranzazu Zalvidea, dio inicio a su residencia artística en CRIA Chiloé el lunes 7 de abril. Provenientes de Valparaíso, las artistas llegaron hasta el Centro Cultural Capanegra para instalar su obra “Aracne: textil, cuerpo y comunidad”, una instalación escénica interactiva que buscó habitar el territorio desde la memoria, el cuerpo y lo colectivo.

Desde su primer día, la residencia se articuló en diálogo constante con el equipo local. El arribo fue cálido, y luego de ubicarse en sus habitaciones, se realizó una reunión de planificación para definir las acciones de montaje y las actividades que enmarcarían la inauguración de la nueva Sala de Exposiciones Capanegra.

Durante los días siguientes, las artistas desplegaron su obra hilando cada elemento con cuidado y detalle. El martes 8 y miércoles 9 de abril estuvieron dedicadas al montaje, interviniendo el espacio interior y exterior de la casa con estructuras textiles suspendidas, luces sensibles al sonido y una disposición escénica que involucraba a los cuerpos en acción. El miércoles por la mañana, participaron también de una entrevista radial junto a la dramaturga argentina Belén Galain, tejiendo redes de palabras y reflexiones sobre sus procesos.

El jueves 10 de abril se vivió un momento memorable con la inauguración de la exposición “Aracne”, que también marcó la apertura oficial de la Sala de Exposiciones Capanegra. La jornada comenzó con los últimos retoques de montaje y la producción del cóctel de bienvenida. La exposición, con su telaraña monumental y su propuesta multisensorial, cautivó a una audiencia numerosa, que no solo observó la obra, sino que la habitó e intervino, cumpliendo así la premisa fundamental del proyecto: construir en conjunto.

Durante los días 11 y 12 de abril, la colectiva profundizó su colaboración con la residencia “Llegar, después de la partida” de Belén Galain. Extendieron su obra hacia el bosque, sumando tejidos y estructuras al recorrido escénico propuesto por la dramaturga. Además, asistieron en los preparativos culinarios del evento final y colaboraron con la escenografía de esta muestra performática, compartiendo saberes y gestos en una jornada cargada de emociones y vínculos.

Finalmente, los días lunes 14 y martes 15 de abril, la experiencia se cerró con el Taller de Tejido Comunitario: Aracne, donde las artistas compartieron con vecinas, artistas y visitantes sus técnicas y miradas. A través del trabajo con fibras y texturas, construyeron en conjunto una pieza mayor comunitaria que pasó a formar parte viva de la instalación.

Esta residencia no solo dejó una huella en el territorio, sino también entre las personas que participaron del proceso. Un tejido en movimiento, donde cada hebra—material o humana—aportó una historia, una emoción, una forma de estar juntas en el arte.